PAPEL MONEDA DE LOS MUNICIPIOS DE ALBACETE DURANTE LA GUERRA CIVIL 

En la España Republicana convivían, desde 1931, la moneda acuñada por los Borbones, con las nuevas monedas y billetes emitidos por el Gobierno de la República.

La sublevación el 18 de Julio de 1936 de parte del ejército español contra el Gobierno establecido, y la consiguiente Guerra Civil, hace que España se fracture en dos partes y, una de sus consecuencias, que es el tema del que nos vamos a ocupar, es que hay dos sistemas monetarios distintos, dos casas de la moneda, dos bancos de España, que competían en el extranjero por la captación de recursos.

Al comenzar la guerra cada bando negó la validez de la moneda del otro, los sublevados rechazaron los billetes emitidos por la República después del 18 de julio y sellaron los anteriores a dicha fecha.

El estado de guerra, induce a población y gobiernos de ambas partes a acaparar las monedas acuñadas en metales nobles, haciendo que éstas desaparezcan de la circulación, lo que no originó un excesivo problema en las zonas controladas por el Gobierno de Burgos, pues además de estampillar el papel moneda de la República, se emitieron nuevos billetes impresos en Zaragoza, Alemania e Italia.

La moneda de plata desapareció de la circulación y se prohibió en el bando republicano en febrero de 1938, también desaparecieron las piezas de bronce muchas de ellas utilizadas para fabricar municiones y otros materiales como el hierro y el cartón se erigieron como soportes monetarios.

La población ocultó la moneda metálica y el gobierno republicano fue incapaz de reaccionar y los municipios, instituciones regionales, sindicatos, partidos políticos, comerciantes y empresas emitieron su propio papel moneda.

La retirada del mercado de la moneda metálica provocó una subida de precios y el desabastecimiento de la población

Por el contrario, diversas circunstancias como el acaparamiento por particulares, la retirada de las monedas por su metal y por la simbología no republicana, y la incautación de los medios de producción hacen que, en las zonas fieles al Gobierno de la República, se produzca una gran escasez de moneda circulante.

La emisión de certificados y documentos de crédito por parte del gobierno no es suficiente para paliar la escasez de moneda y la población, para poder efectuar sus transacciones comerciales, incluso las más básicas, comienza a utilizar vales que, lógicamente, tienen una circulación muy limitada.

Estos vales se difundieron rápidamente, sin control de fabricación lo que facilitaba las falsificaciones y eran refrendados por las corporaciones locales, sindicatos y partidos políticos.

Ayuntamientos, consejos locales, sindicatos, colectividades obreras, unidades militares, economatos, empresas industriales y hasta comerciantes individuales, emiten su propia moneda, normalmente en papel y algunos en metal no noble, para intentar paliar esta situación y hacer posible los intercambios comerciales.

El poder liberatorio de éstas emisiones locales, estaba limitado al ámbito de la entidad o, en el mejor de los casos, del término municipal que lo emitía, lo que tuvo como consecuencia que se acaparasen más aún los medios de pago válidos en todo el territorio nacional.

El 16 de diciembre de 1937, la Diputación acordó une emisión provincial de moneda que sustituyese a las de las entidades locales.

El establecimiento de las Brigadas Internacionales en Albacete y la llegada de contingentes a partir de Octubre de 1936, da lugar a que en nuestra provincia, con el considerable aumento de población que esto supuso, la escasez de moneda circulante fuese aún más acusada que en otras provincias españolas.

El 6 de Enero de 1938, un decreto firmado por Negrín, después de afirmar que la emisión de moneda es potestad exclusiva del Estado, da un mes de plazo para que se retiren de circulación las emisiones locales, bajo sanciones e incluso clausura de los locales donde sean admitidos. Este decreto fue corroborado con una orden de 7 de Febrero del mismo año, prorrogando el plazo 20 días más.

El 24 de Febrero de 1938 se decreta la utilización como moneda de sellos de correos y timbres móviles pegados en discos de cartón.

Descripción de los billetes.

En el diseño cada pueblo cogió el suyo aunque el mensaje es similar buscándose exaltar la República.

En el anverso, los emitidos por la ciudad de Albacete presentan a un obrero dentro de una cartela estrellada, con un mazo en actitud de enderezar España cuyo perfil también se representa. En el reverso, el escudo heráldico con corona mural. En las esquinas, la alegoría de la República y el puño cerrado.

En Almansa los billetes se imprimieron representando en su anverso una alegoría de la República entronizada junto a un león y portando una antorcha como símbolo de la iluminación al pueblo.

En el reverso, presenta los emblemas de la provincia y la localidad con corona mural. Los billetes emitidos en Alpera son iguales a los de Almansa

Los vales no cuentan con representaciones iconográficas, solo en ocasiones aparece el escudo de la localidad.

El Consejo Municipal de Higueruela emitió una cantidad indeterminada de billetes, pero siempre inferior a 10.000, de 3 valores: 25 y 50 Céntimos y 1 Peseta. La impresión se realizó en Almansa por “Artes Gráficas hijo de Constantino Sánchez”, siendo el diseño idéntico en los tres billetes, salvo la expresión del valor y el color: azul para los de 25 Cts., marrón el de 50 Cts. Y lila el de 1 Pta.; todos ellos de un tamaño de 60 x 89 mm.

La descripción es la siguiente:

Anverso: Personificación de la República con gorro frigio, sentada a derecha, sosteniendo en su mano izquierda con el brazo extendido, un caduceo con petaso y apoyando el derecho sobre un escudo de España con corona mural de cuatro torres. En el suelo, motivos florales y frutales, todo dentro de orla circular de tres líneas, surmontada de dos cartelas con las leyendas CONSEJO MUNICIPAL, HIGUERUELA y adornos frutales. A los lados el valor y debajo, PAPEL MONEDA DE VALOR EXCLUSIVAMENTE LOCAL, todo dentro de orla con expresión del valor en los ángulos superiores.

Reverso: Liso, impreso con tinta roja en el centro número y cifra de 4 dígitos y asterisco de seis líneas rematadas por puntos. Abajo, A.G. SÁNCHEZ.- ALMANSA. Impresión con sello de caucho: CONSEJO MUNICIPAL.- HIGUERUELA (Albacete), todo dentro de óvalo de doble línea.

Conocemos algunos ejemplares sin impresión en reverso, que probablemente no fueron puestos en circulación. No se ha encontrado en el archivo municipal de Higueruela documento alguno sobre el acuerdo para emitir estos billetes o factura de pago al impresor.