Al igual que como hiciera este pasado lunes, 7 de junio, cuando asistió al Pleno de renuncia de Vicente Casañ como alcalde de Albacete, el presidente de la Diputación, Santi Cabañero, ha sido testigo del relevo al frente del Ayuntamiento de la capital provincial, donde el socialista Emilio Sáez ha tomado posesión de la Alcaldía para la mitad de mandato que queda por desarrollarse, tal y como se desprende del acuerdo que, en su día, sus respectivas formaciones políticas suscribieron tras las últimas elecciones municipales de cara a la gobernabilidad de Albacete. Un acto al que ha acudido acompañado por el vicepresidente provincial, Fran Valera.
En su respaldo total a los distintos Ayuntamientos de la provincia y teniendo en cuenta el peso que el de la capital tiene en cuestiones que resultan fundamentales para el progreso y el impulso a múltiples niveles del conjunto del territorio, Santi Cabañero ha querido arropar al ya nuevo alcalde y al conjunto de su Equipo de Gobierno (entre el que hay dos integrantes del Equipo de Gobierno de la propia Diputación: la vicepresidenta provincial responsable del área medioambiental, Amparo Torres, que ostenta la Concejalía de Empleo, y la diputada provincial de Servicio Sociales, Juani García, que es edil de Atención a las Personas). Además de ellas, pero fuera del Equipo de Gobierno, otros dos miembros de la Corporación Municipal albaceteña son también diputados provinciales: el Popular Francisco Navarro y el integrante de C’s, Arturo Gotor.
Cabañero les ha recordado que cuentan con la mano tendida de la Diputación, al margen de cualquier intento de inestabilidad ajeno al interés común de los y las albacetenses, y desde el pleno convencimiento de que la institución provincial y el Ayuntamiento de Albacete seguirán colaborando y trabajando conjuntamente y de forma coordinada con la ilusión de lograr que la ciudad (y, con ella, el conjunto de la provincia), sean capaces de dar cabida a nuevos e interesantes proyectos que, además de oportunidades de todo tipo, traigan consigo una cada vez mejor calidad de vida para la población de la ciudad que es “buena parte del centro neurálgico y motor de esta tierra y del conjunto de la región”.
Además, Cabañero ha insistido en lo importante que resulta este momento a nivel social, en el que “las Administraciones entre sí (y en su propio seno) han de trabajar implicadas más que nunca en lograr acuerdos y en dialogar, más allá de intereses partidistas y pensando, únicamente, en lo mejor para una ciudadanía, que no necesita de más ruido ni de más tensión deliberada, sino que precisa de respuestas cuando la reactivación económica, laboral y social apremian después de un largo año muy complicado sacudido por una pandemia que ha dado la vuelta a todo”.
Agradeciendo la buena sintonía en la que Diputación y Ayuntamiento de Albacete han podido trabajar de la mano en esta primera mitad de mandato, especialmente, haciendo frente común al reto de luchar contra una pandemia que venía “sin manual de instrucciones y cargada de incertidumbres”, el presidente provincial se ha mostrado “convencido e ilusionado” con el camino que resta por recorrer, y en el que ha afirmado que ambas instituciones, con el apoyo también de los Gobiernos regional y nacional, seguirán trabajando con el objetivo de estar a la altura de la gente, coordinándose para conseguir que, de la mano de impulsos como los que puedan traer los fondos europeos, Albacete se consolide como el corazón, joven y dinámico, de una provincia capaz de dotarlo de recursos que lo hagan mejor día a día, y viceversa.