Apenas cuatro días bastaron para que se agotaran los 400 ejemplares del libro ‘El árbol optimista’ con el que la Diputación de Albacete quiso apoyar el gran ‘proyecto de innovación educativa y aprendizaje servicio’ que desde el IES ‘Amparo Sanz’ de la capital se puso en marcha a raíz de la entrevista que un grupo de alumnos y alumnas (hoy, en 3º y 4º de ESO) tuvo ocasión de realizarle (cursando 1º) al siempre eterno e inolvidable ‘Doctor Cepillo’.
Aquella conversación con el ‘Capitán Optimista’ del grupo de Los Guachis del Hospital General Universitario de Albacete, supuso un punto de inflexión para esos chicos y chicas en los que el propio Antonio vio tierra fértil para sembrar… Y sembró.
Antes de acabar esa entrevista, les dijo: “Os pediría que fueseis un poco Guachis; que creyeseis en las pequeñas cosas buenas de la vida; en lo que supone una caricia, una sonrisa, un beso, un ‘te quiero’. Sé que lo sois, pero intentar cada mañana al levantaros decir: ¿cómo puedo ser hoy mejor persona? No ser mejor para tener más copas en la vitrina de casa o medallas para el Instituto, sino ser mejor para facilitar y hacer mejor la vida del que tengo al lado. Comprobaréis que, con el tiempo, seréis más felices y recibiréis más. Y dar gracias por tener salud, por no estar atado a una cama, y deciros cada día: tengo la suerte de vivir en un país desarrollado y estoy sano”.
A raíz de esa entrevista y de aquellas palabras, al alumnado se fue implicando en iniciativas de participación social, solidaridad e inteligencia emocional y así, en el curso 2019/2020, el Centro comenzó de su mano un proyecto de innovación educativa y de aprendizaje servicio, interdisciplinar y multicurricular y siempre trabajando en clave optimista y desde la perspectiva de las emociones. En él también se implicó, de lleno, alumnado del Grupo de Los Guachis (Aulas del CHUA), del Programa Despierta (Altas Capacidades), de la Asociación APANDAH (con déficit de atención), con o sin hiperactividad y de la Asociación Desarrollo Autismo.
‘El árbol’ que venció a la pandemia…
Aquel trabajo emocionante e ilusionante para sus protagonistas estaba a pleno rendimiento en las aulas en marzo del pasado año, cuando la pandemia de la COVID-19 irrumpió en nuestras vidas truncando las clases presenciales y, con ello, sumiendo el proyecto en el letargo en el que, poco a poco, fue cayendo la vida que hasta entonces habíamos conocido.
Con el comienzo del presente curso, el pasado septiembre, se volvió presencialmente a aulas en las que las mascarillas eran las nuevas compañeras de clase y, en el IES ‘Amparo Sanz’ poco se pensaba ya en acabar con aquel ‘Cuaderno Optimista’ que tanto les había ilusionado. Hasta que a mediados de octubre, una alumna de 4º de E.S.O. (Lucía Vidal), buscó a Carmen Hernández (la coordinadora del proyecto) para decirle que ya tenía preparada la portada… y la chispa prendió de nuevo, y se avicó cuando Ana Martínez Soto (directora del Grupo de Los Guachis del CHUA) también contactó con Carmen para decirle que ellos y ellas también habían continuado trabajando durante la pandemia, con sus ‘Letras de Esperanza’ animando a tanta gente. Los ‘árboles optimistas’ que Rosario Felipe (la profesora de Educación Plástica) se dedicó a diseñar durante el confinamiento hicieron el resto: un trabajo que parece mágico pero que es real, y que la Diputación de Albacete, por expreso deseo de su presidente, Santi Cabañero, no dudó en llevar al papel.
Cerca de trescientas frases, ilustraciones, composiciones artísticas y literarias de los alumnos y las alumnas del IES ‘Amparo Sanz’ se sumaron a las más de cien fichas y trabajos que realizaron Los Guachis y los niños y niñas del programa Despierta.
Y, con todo ese material, la semilla que el Doctor Cepillo había plantado algo más de dos año atrás, se había convertido en un firme y maravilloso ‘Árbol optimista’. La institución provincial editó 400 ejemplares y cerca de 500 tarjetas que, por separado, muestran las distintas imágenes que conforman el libro.
Amparo Monzó: “Este proyecto ha logrado que toda la Comunidad Educativa del Amparo Sanz se haya venido arriba nuevamente, cuando más lo necesitaba…”
Esta semana, la directora del IES Amparo Sanz (Carmen Monzó) y la jefa de estudios y cordinadora del proyecto (Carmen Hernández), han visitado la Diputación para entregar a Santi Cabañero un ejemplar y contarle los detalles de este proyecto que, como le explicaba la propia directora, “ha logrado que toda la Comunidad Educativa del Amparo Sanz se haya venido arriba nuevamente, cuando más lo necesitaba” porque, le confesaba, se notaba que la pandemia había hecho mella en los ánimos.
Cabañero les ha anunciado que la Diputación va a poner en marcha una segunda edición de 500 ejemplares más de este “tesoro didáctico –les ha asegurado – que además, de un gran trabajo multidisciplinar en las aulas, desprende un valor emocional incalculable, porque todas y cada una de las personas que han participado, han dejado en él una parte de sí”.
“Un sueño cumplido”, tal y como afirman la directora del Centro y la coordinadora del proyecto que ha hecho que el alumnado del IES ‘Amparo Sanz’ descubra realidades diferentes a la suya y ahora sea capaz de mirar como compañeros a los niños, niñas y jóvenes que conviven con el cáncer o con cualquier otra dificultad.
Por expreso deseo de los chicos y chicas del Instituto que ha firmado esta iniciativa, el libro se usará, además de para implicar a cuantos Centros y aulas lo deseen a trabajar este proyecto, para ayudar a la Asociación de Familiares y Amigos de Niños con Cáncer, de modo que los ejemplares se han podido conseguir tanto en la sede de AFANION como en la Librería Popular por un pequeño donativo a destinar íntegramente a la Asociación. Y lo mismo sucederá cuando, en pocos días, estén listos los 500 ejemplares más anunciados por el presidente de la Diputación.
Santi Cabañero ha agradecido expresamente a Carmen Monzó Y Carmen Hernández la labor educativa que desarrollan en el IES ‘Amparo Sanz’ y que, además de en contenidos curriculares, educa al alumnado en valores, despertando su participación, su curiosidad y capacidad crítica.
No en vano, no es la primera vez que la Diputación de Albacete ha colaborado con este Centro (por ejemplo, en otro interesante trabajo que bajo el título ‘Repoblando el Futuro’, abordaba el papel de la juventud en la lucha contra la despoblación del medio rural). Y, a tenor del talento y las ganas que la Comunidad Educativa del Amparo Sanz vuelca en todo aquello en lo que se implica, tal y como ha asegurado el presidente provincial, no será la última.