Límites provinciales

Plano geográfico que representa los límites septentrional y meridional relativos de las provincias de Cuenca y Albacete

Plano geográfico que representa los límites septentrional y meridional relativos de las provincias de Cuenca y Albacete por su línea de conjunción según su división actual, y la proyectada como más natural para una nueva división marcada por una línea roja. Van también delineados los partidos judiciales con la línea morada, en los puntos de contacto de ambas provincias. 1836. Unidad documental simple. E1 plano manuscrito, color, 53 x 42 cm. Escala gráfica de leguas castellanas de 20 al grado = 18,7 cm. (ca. 1:296.000)

En el siglo XVIII los diferentes pueblos de la actual provincia de Albacete estaban repartidos entre la provincia de Cuenca, la provincia de la Mancha y la provincia de Murcia. La división realizada por Floridablanca había buscado el equilibrio entre la población y la riqueza de los diversos territorios, el antiguo Marquesado de Villena quedó dividido entre las provincias de Murcia, Cuenca y La Mancha.

En 1810, José Bonaparte estructuró España en 38 prefecturas o departamentos, a los que denominó con nombres geográficos, principalmente de ríos. En 1812 las Cortes de Cádiz realizan otra división provincial, creando tres tipos de provincias, según su extensión, población y riqueza; la llegada de Fernando VII al Trono impidió que este proyecto llegara a implantarse.

Durante el Trienio Liberal, por Decreto de 27 de enero de 1822, se distribuye el territorio nacional en 52 provincias, creándose la Provincia de La Mancha Alta, con capital en Chinchilla, con parte de las anteriores provincias de Cuenca, Murcia y La Mancha; sus límites prácticamente coincidían con la actual, excepto por la exclusión de la Roda y Villarrobledo.

A la muerte de Fernando VII , su viuda María Cristina de Nápoles ocupó la regencia mientras su hija Isabel cumplía la mayoría de edad. Durante este período es cuando tiene lugar nuestra actual división provincial. Ésta se debe al ministro Javier de Burgos, quien mediante Real Decreto de 30 de noviembre de 1833 lleva a cabo la reordenación administrativa.

Para Albacete esta fecha es de especial trascendencia por dos motivos: en primer lugar porque supone la creación de la provincia tal y como es en la actualidad, aunque con algunas modificaciones; así en septiembre de 1836 se segregó Villena y en 1846 se agregó Villarrobledo, segregándolo de Ciudad Real. La provincia quedó dividida en 8 partidos judiciales.

En segundo lugar porque es el momento del cambio de capitalidad de Chinchilla a Albacete. También es importante destacar que el territorio del reino de Murcia se distribuye entre las provincias de Albacete y Murcia. A partir del Real Decreto el territorio español quedaba dividido en cuarenta y nueve provincias, que tomarían el nombre de sus capitales respectivas. Esta división no se limitaba al orden administrativo, sino que adaptaba las demarcaciones militares, judiciales y de hacienda. Con esta finalidad, los subdelegados de Fomento demarcaron los confines de sus provincias respectivas reuniendo las observaciones sobre la agregación o separación de los pueblos y trasladándolas al Ministerio donde se instruyó el expediente general. Los dichos subdelegados se encargaron de levantar planos topográficos exactos de sus provincias respectivas.

La recién creada provincia de Albacete no tenía diócesis propia, sino que sus territorios pertenecían a las de Toledo, Cuenca, Cartagena, Orihuela y la Vicaría de Yeste (Orden de Santiago). La Diócesis de Albacete se creó en 1950.

Uno de los expedientes más antiguos que conserva el archivo de la Diputación de Albacete es el «Expediente de rectificación de límites de esta provincia» (1.836-1.837), que se tramita como consecuencia de la anterior disposición legislativa y también del Real

Decreto de 21 de abril de 1.834 por el que se dividen las provincias en partidos judiciales. Está formado por una conjunto de documentos comprendidos entre el 21 de febrero de 1836 y el 12 de abril de 1837, entre los que se encuentran varias solicitudes de municipios para ser segregados (como es el caso de Villena), o bien para ser agregados a la provincia de Albacete. Entre estos últimos podemos citar las localidades de Quintanar del Rey y Villanueva de la Jara.

La Comisión Mixta de División Territorial, por circular enviada a la Diputación solicitó que ésta elaborase un informe con las propuestas que a su juicio fuesen más convenientes. Adjunta a la circular consta la relación de municipios que había reclamado o solicitado su permanencia a la nueva provincia de Albacete.

Plano topográfico de los partidos judiciales de La Roda, Motilla, Casas Ibáñez y Tarazona

Plano topográfico de los partidos judiciales de La Roda, Motilla, Casas Ibáñez y Tarazona según indica la exposición que lo acompaña. Año de 1834. Unidad documental simple. E1 plano manuscrito , color, 22 x 23 cm. en hoja de 30 x 42 cm. Escala gráfica de leguas comunes = 7,2 cm (ca. 1:540.000)

La Corporación encargó la redacción de este informe al entonces diputado provincial por el Partido Judicial de Casas Ibañez, Dionisio Villena, cura de Jorquera. De la propuesta elevada al Gobierno de la Reina transcribimos literalmente algunos párrafos en los que se fija y justifica, la linde propuesta:

«[…] La desmedida estension de las provincias de Cuenca, Ciudad Real , Murcia sugirio al Govierno la feliz idea de formar otra central conpuesta de las partes redundantes de aquellas o de los pueblos que por su lejania de las respectivas capitales recibian de un modo lento la influencia de las autoridades superiores. Albacete fue declarada capital de esta nueba probincia en el Decreto de division territorial de la Monarquia de 30 de Novienbre de 1833. Situada en una feraz y estensa llanura, en la confluencia de las carreteras de Madrid, Murcia, Alicante y Valencia solo la fuerza de su ventajosa posicion la hizo descollar en cultura, productos agricolas y fabriles, comercio y poblacion. Cuando los pueblos comarcanos yacian estacionarios, o quizas retrogados, en Albacete se notaba un movimiento vital, una robustez siempre creciente que la hizo digna de la capitalidad, y cuya preminencia el informante corrobora, no como una gracia, sino como un homenaje tributado a la justicia, y al bien de la provincia.[…]

El limite de el Este separa esta provincia de Albacete de la de Valencia y su esactitud escusa toda correccion. Del límite Sur, que la separa de las provincias de Alicante y Murcia, habria informado el exponente que notaba la deformidad de que Villena hiciese parte de esta provincia, y no de la de Alicante a la que su prosimidad, relaciones comerciales, y genio de sus habitantes debia corresponder. La inspeccion de el mapa hace ver que Villena forma un angulo saliente, que la pone en contacto con Alicante, y que priva al contorno de anbas provincias de su rotundidad. Afortunadamente la sabiduria del Gobierno ha palpado estos males, y anticipandose a los deseos del informante ha reparado un agravio, y hecho innecesaria toda ulterior discusion sobre esta cuestion ya decidida.. […]

Estudiando esta parte de la demarcacion de nuestra probincia me he convencido de la conveniencia de agregarle los pueblos de Villarrodrigo, Albadalejo, Villanueba de la Fuente, Montiel y Villahermosa que segun la actual divisióo corresponden a la de Ciudad Real y forman con respecto a esta un angulo saliente que se interna en la de Albacete, Villarrodrigo se halla enclavado en su circunferencia, los terminos de Alcaraz y Osa de Montiel en la misma confluyen en dos cabos, el primero mira al Norte, y el segundo al Sur y en el espacio que los separa resulta un ancho seno en que estan situados los cuatro ultimos pueblos. La rectificacion que se propone no puede ser atacada con objeciones formales, los insinuados pueblos se uniran a una probincia de cuya capital estan mas inmediatos, y cuyas comunicaciones son analogas a las de la sierra de Alcaraz con las que estan enlazados, su corto vecindario lejos de ronper, restablecio el equilibrio que debe haber en la estension y numero de habitantes de las respectivas probincias, pues Ciudad Real escede a la de Albacete en 879 almas, y perfecciona por ultimo el límite Oeste quitandole la deformidad de sus muchas inflecsiones, y le da una direccion mas recta y natural. A la izquierda del Zancara y ya en las llanuras de la mancha y Oeste de la linea que nos ocupa se encuentra Villarrobledo que igualmente convendria segregar de Ciudad Real y unir a Albacete, su mayor prosimidad a esta capital con la que le pone en contacto el camino real que baja de Madrid, y otras razones de publica utilidad decidieron a su Ayuntamiento a solicitar del Gobierno esta agregación, que al informante se presenta como digna de que la apoye la justificacion de Vuestra Excelencia, pues en su contra nada sabido puede oponerse. […]

La linea divisoria septentrional de que nos ocupamos, dista de Albacete por su parte mas inmediata seis leguas y de Cuenca catorce, ya se nota aqui un vicio, a muchos pueblos del sur de Cuenca se les aleja de una capital que tienen a la vista y que casi tocan con la mano. Este sacrificio no lo hacen necesario ni elevadas montañas, ni desfiladeros intransitables, ni rios caudalosos que interponiendose entre anbas probincias formen sus barreras naturales. Lejos de esto los terrenos comprendidos de un lado y otro del actual limite son llanos, sus producciones analogas, las relaciones mercantiles las mismas, los usos y costunbres y necesidades identicas. .[…]
Esta ligera reseña evidencia las ventajas de alterar la linea divisoria del Norte y de alejarla de Albacete, conprendiendo en esta probincia pueblos que al presente se hallan dislocados, y en una asociacion politica a que ni la naturaleza, ni las relaciones sociales les convida.

La inspeccion y estudio del terreno contiguo por Nortr y Sur a la linea divisoria de Albacete y Cuenca persuade, que dicho limite debe llevar la siguiente direccion. Arrancará como al presente en el rio Zancara entre Socuellamos y Probencio, sigue por el Sur de San Clemente, Villar de Cantos, Atalaya y Garces donde corta al Jucar, Olmedilla, Valverdejo, Gabaldon, Campillo de Altobuey y la Pesquera y toca en el Cabriel en el punto en que lo hacen la division de los terminos de la dicha Pesquera y Mingranilla. Esta ultima La Graja, Motilla del Palancar, Valhermoso, Alarcon sobre el Jucar, Cañada Juncosa y Vara de Rey formarán el limite norte de la probincia de Albacete, desde el Zancara al Cabriel, por cuyo rio continua hasta Cofrentes primer pueblo de la provincia de Valencia. Con el Cabriel estan en contacto y en el terminan principiando por el Oeste las jurisdicciones de Mingranilla, Iniesta, Villamalea, Casas Ibánez, Alborea, Toya y Casas de Bes que confronta con el ya indicado Cofrentes.

Si se adoptase esta nueba demarcación, lograriamos separar, desde el Jucar al Cabriel un pais montuoso y poblado de pinares, de otro desenbarazado, y que es parte de las celebres llanuras de Albacete, el primero por su estructura fisica se enlaza naturalmente con la serrania de Cuenca de que es un apendice; el segundo sin hacer violencia de las leyes fisicas y aun al orden social no puede separarse de Albacete. Los pueblos situados al Sur de la linea que proponemos comunican con esta capital, por caminos comodos y en todo tienpo de facil uso para carruajes, las muchas y variadas relaciones que unen a la provincia con su capital se sostendrian, y estrecharian con nuebos lazos, y la conduccion de quintos, caudales y espedientes se realizaria con ahorro de tienpo y gastos. La seguridad de los viajeros es tan conpleta en este pais abierto que escusa toda escolta y precaucion, los mercados de Albacete, su industria floreciente en algunos ramos, su buenas posadas, su comercio activo y el hallarse situada en la principal carretera de la peninsula atraen a su seno todas las producciones del pais en el que hallan la mejor salida, el comercio de granos sobre todo es de mucha inportancia y vivifica la agricultura de un distrito esencialmente labrador. No es pues una asercion aventurada y si una verdad que produce el mas intimo convencimiento el que los pueblos conprendidos en la zona que se describe pertenecen a Albacete por todos estos puntos de contacto, ellos la miran como su metropoli como el mejor mercado para el despacho de sus generos, y el unico en que pueden surtirse de los articulos que necesitan.

Si a estas ventajas puramente economicas y mercantiles se asocian las gubernativas y judiciales, resultará una doble conveniencia entre la capital y los nuebos habitantes que se le agregasen, estos al mismo tienpo que pasasen a Albacete a dar giro a sus negocios comerciales e industriales evacuarian los gubernativos y contenciosos.

Un pais cuyo suelo, clima y producciones son tan parecidas, no puede estar habitado por personas de usos, y costunbres diferentes, en efecto el genio de estos pueblos forma de todos ellos una sola familia que estrechada con los lazos de unas mismas necesidades, y de un mutuo interes presagia ya de antemano una concordia fraternal que es del mejor aguero en todo sistema politico; la paz y el sosiego se afianzaran mas y mas los derechos politicos se ejercerán sin las convulsiones que en estas crisis afectan a las naciones, y gobernantes y gobernados conoceran y amarán unos deberes que tan gratos los hace la unidad de miras y de afecciones.

El terrero al Norte de la linea, y que sera de la conprensión de la provincia de Cuenca es aspero y montañoso, los caminos participando de la misma escabrosidad son inaccesibles a carruajes, y atraviesan bosques y despoblados en que amenazan continuos peligros; de aqui lo dispendioso de los viajes el retraso en el servicio publico, y toda clase de riesgos e incomodidades. Estas suben a su mas alto punto en los inviernos prolongados, que se esperimentan en la sierra, los ventisqueros cubren los caminos y obstruyen su paso, y en el derretimiento de las nieves profundos lodazares los hacen aun mas penosos. ¿Puede haber causa razonable para negar a tantos pueblos un beneficio que pide con ansia y al que tienen un derecho de justicia?. .[…]

La rectificacion de limites, en que se insiste, no desmenbra de Cuenca un terreno y poblacion tan considerable que decaiga del rango que le corresponde. Segun el censo publicado por el Gobierno en su Decreto de 30 de Novienbre de 1833 la poblacion de Cuenca es de 234,582 almas, la de Albacete de 190,766 restando a favor de la primera 43,816, y como los datos mas esactos hagan subir a solo 249 los habitantes que se segregan de Cuenca, para incorporarlos a la provincia de Albacete, es visto que este arreglo nivela su poblacion respectiva, corrije la desmedida superioridad de la primera, y las iguala en el ejercicio de los derechos politicos tan estimables en un gobierno representativo, facilita el despacho de los negocios, y evita el disgusto de que unas oficinas se hallen sobrecargadas y otras en la holganza, todo en daño de los pueblos, y en mal de los gobernados. .[…]

Esta propuesta queda reflejada en los dos planos que se adjuntan: el primero corresponde a un plano geográfico con los límites territoriales de la provincia de Albacete con la provincia de Cuenca, en el que se señala la división propuesta mediante una línea roja.

El segundo es un plano topográfico de los partidos judiciales de la Roda, Motilla, Casas de Ibáñez y Tarazona, en el que se especifican los municipios que los componen y las distancias de éstos con sus respectivas cabezas de partido. Así como las distancias a Albacete y a Cuenca de los pueblos cuya agregación se insinúa: Quintanar, Villagarcía, Casasimarro, Sisante, Rubielos altos, Rubielos bajos, La Jara, Casas de Arriba, Casas de Abajo, Pozo Seco, La Motilla, Peral, Campillo, Castillejo, Iniesta, Ledaña, Herrumblar, La Puebla, Villarta y Villalpardo.